Hay veces que llevas mucho tiempo queriendo hacer algo en particular pero que, debido a falta de tiempo u oportunidad, no has podido realizar. Pues bien, éste es el caso de la siguiente creación que os quiero presentar. Supongo que si os gusta la repostería creativa habréis oído hablar de la tarta o los cupcakes red velvet (terciopelo rojo, en español). Se trata de un bizcocho esponjoso de color rojo, con sabor a vainilla y cierto toque de cacao.
La sensación que yo siempre he tenido es que, si no has elaborado nunca esta receta, no te podías considerar una verdadera repostera creativa. Y ese era mi caso. Hasta ahora. No quiero decir que no me considerase una repostera creativa, sino que por primera vez (¡por fin!) he horneado una tarta Red Velvet. Y ha hecho falta un encargo para ponerme con ello.
Me hubiese gustado poder mostraros un corte de la tarta para que pudieses comprobar el tono rojo intenso del bizcocho (en contraste con el blanco de la crema de queso) pero, como ya he comentado, era un encargo por lo que no podía partirla. Aunque podéis haceros una idea viendo las migas de bizcocho que coronan la tarta.
Por desgracia no he podido probarla ya terminada, sin embargo puedo aseguraros que, después de probar un poco de bizcocho red velvet que sobró, ahora entiendo la fama de esta receta. El color es lo de menos (ya que cualquier tipo de bizcocho se puede colorear con colorante en pasta) pero es que la mezcla entre vainilla, cacao y esponjosidad extrema es sublime 😍 Tened bien seguro que pronto la repetiré ¡para comérmela toda yo!
Todo un descubrimiento, la verdad. Al igual que la canción que he escogido para esta tarta. Se trata de Hope there's someone de Antony and The Johnsons. Os dejo el vídeo a través del cual descubrimos mi hermana y yo esta sentimental canción. El cantante, todo un personaje, pero con una voz prodigiosa, eso sí.
I don't want to be the one
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